El verano ha dado para mucho. Para tanto como para reactivar mi blog con nuevas ideas y diseño más fresco. Espero que os guste el tema que he elegido para el relanzamiento. Estaré encantado de contestar a vuestros comentarios.
Un aumento de pecho, o cualquier cirugía plástica, implica un asesoramiento médico, una seguridad, una confianza en el cirujano y la clínica a la que se acude, de ahí que primero como director de una clínica de cirugía plástica, y segundo como consultor de marketing, me haya sorprendido extraordinariamente encontrar anuncios de prótesis mamarias en Wallapop. Sí, habéis leído bien el título, prótesis mamarias en Wallapop.
Es cierto que en la nueva economía colaborativa, abierta e hiperconectada, es normal ver como se realizan a diario miles de transacciones entre particulares (P2P) o incluso entre particulares y empresas (P2B), algo que ya empieza a ser – lamentablemente – normal , lo cual ha originado un mercado algo turbio. En este caso, y lo que me preocupa de este tema en cuestión, no es que algunas pacientes, tras la retirada de sus prótesis, por la razón que sea, las traten de vender, sino el hecho de que al otro lado alguien quiera comprarlas. Y me preocupa aun más que el comprador no sea otra paciente, sino un «médico» o «clínica» que quiera aprovechar la jugada para sacar tajada y abaratar sus costes.
Prótesis mamarias en Wallapop
No tengo datos serios como para «acusar a nadie», pero en esta vida, si hay un vendedor es porque existe un comprador. Solo atendiendo a las cientos de visitas que tienen algunas de estas ofertas y los «favoritos» de los anuncios, es decir, gente que guarda estas ofertas porque está interesado, nos hace pensar que existen transacciones de este tipo y un modelo de negocio detrás.
Otro de los temas que me llaman la atención, es que que la gente realice búsquedas en esta aplicación y en otros portales similares, sobre temas tan serios como la salud. No estamos hablando de vender una prótesis externa, algo que puedas colocar sobre tu piel, sobre la cabeza, … sino algo que alguien ha llevado dentro de su cuerpo y que alguien, ya sea otro paciente o una clínica, pretender meterlo en el cuerpo de otro paciente. Esto es literalmente de locos.
El problema está muy cerca
Aquí en Sevilla, me da pánico ver como una señora ofrece sus prótesis, que cito literalmente «han estado 6 meses dentro de mi», por tan solo 100 € y que además afirma que están en perfecto estado. Por favor, seamos serios, esto no son zapatos de segunda mano o un bolso, es un producto sanitario.
Bueno, quería difundir este fenómeno, con la esperanza de alertar a los pacientes de que esto es una barbaridad y de poner en conocimiento de nuestros proveedores y a las autoridades sanitarias, para que hagan algo al respecto.
Os seguiré contando, que esto no acaba aquí 😉